Fabada Asturiana

Esta receta la habia olvidado por completo (tampoco tiene mucho misterio) hasta

que hace poco decidí volver a hacerlas. 

Me la pasó hace unos años la madre de un compañero de empresa en la epoca 

en la que trabaje en Oviedo. La señora Julia era una "guisandera" (así es como se
denominaba ella misma muy orgullosa) me contó la receta de muy buen grado y 

no contenta con eso me la preparo en casa de su hijo y mientras se cocinaban me 

enseñó como se saborea el cabrales.. untado junto con sidra sobre pan.. maravilloso.
Hay cuatro condiciones que se deben para que la Fabada salga bien, que la Faba sea
autentica Faba de la Granja Asturiana (insistía mucho en eso),  el compango debe ser 

de buena calidad , el agua debe ser envasada.. o mejor del grifo dejándola reposar 

una noche, y la cocción a fuego muy muy lento (no hay prisa), ademas recomendaban 

saborearlas al día siguiente ya que aseguraban que sabían mucho mejor.. doy fe de 

ello...... buenísimas.

INGREDIENTES

400 gr de Faba de la Granja Asturiana

2 Chorizos

2 Morcillas

2 Piezas de panceta

1 Cebolla pequeña

1 pieza de lacón (opcional)

1 Diente de ajo

Unas hebras de Azafrán

PREPARACION

Poner las fabas a remojo en agua fría durante toda la noche, dejar una cacerola 

llena de agua para que evapore el cloro.
La mañana siguiente quitarles el agua del remojo,  echarlas en una cacerola 

de acero inoxidable cubiertas de agua fría (el agua que dejamos la noche anterior) 

y ponerlas al fuego. 

Cuando empiezan a hervir eliminamos la espuma y añadimos el compango

la cebolla y el ajo. En el momento en que vuelvan a hervir debemos bajar 

el fuego y las dejamos cocer lentamente procurando que siempre estén cubiertas 

de agua para que no se rompan.
Se va añadiendo pequeñas cantidades de agua para rompa el hervor según este se 

produzca y que de esta forma se sigan cociendo despacio.
Tostamos el azafrán a media cocción (este tostado se puede realizar poniendo
el azafran sobre un poco de papel albal al fuego), y se añade a las fabes.
Añadimos un poco de sal teniendo en cuenta el embutido que puede darles bastante gusto.

Se dejan cocer hasta que estén tiernas, se les apaga el fuego dejándolas reposar 

durante un buen rato antes de servir.